El Toyota Supra ha sido durante mucho tiempo una fuerza dominante en la pista, y el Nº 94 con los colores de Castrol conducido por Noël y Michel Dexters en el Belcar Spa 2002 no es una excepción. Con un llamativo diseño en blanco y verde, este Supra se convirtió en un vehículo destacado en uno de los circuitos más emblemáticos de Bélgica. Conocido por su potente rendimiento y fiabilidad, el Supra ofrecía una velocidad y una precisión emocionantes en la desafiante pista de Spa-Francorchamps. El dúo de Dexters llevó el coche al límite, encarnando el espíritu competitivo de la serie Belcar.
